BALTASAR SERRANO SERRANO
COBRADOR DE TRANSPORTES COMES

Mi padre Baltasar Serrano; ¿Qué puedo contar de él? 
Lo principal que era una gran persona.

 Me llena de emoción y cariño el escribir sobre él, pues hace muy poco tiempo que nos dejó y aún lo echamos mucho de menos.

Nació el 25 de Julio de 1925. Era el hijo más pequeño de una familia de tres hermanos. Sus padres: Curro Serrano Pacheco y Curra Serrano, vivían en el cortijo de Aciscar.

Mi abuelo estuvo de encargado de la finca mucho tiempo y allí nació él y pasó su infancia y parte de su juventud. Al igual que su hermano Curro, ayudaba en las faenas de la finca.

Contaba anécdotas muy divertidas vividas junto a su hermano.

 Creo que fue en aquel tiempo cuando le cogió el amor a la caza y a los perros, que fue su disfrute durante toda la vida y hasta los últimos días.

 Siendo un muchacho se vinieron a Facinas a vivir, donde tenían una casa, y aquí ayudaba a sus padres a hacer pan que luego vendían en casa. También trabajó en el contrabando de tabaco y café, con un caballo transportando de aquí para allá. Él decía: Como no había donde ganarse unas perrillas me metí en el tabaco.

En aquel tiempo estaba muy perseguido.

 En el año 1950 se colocó en Transportes Generales Comes como cobrador, y en 1951 se caso con su novia (mi madre) Antonia De Saro Pérez y se fueron a vivir a Algeciras pues trabajaba allí. Al poco tiempo se fue a vivir con ellos el hermano de mi madre Francisco De Saro, que mi padre ayudó a entrar en Comes como cobrador también. Vivió con ellos hasta que se casó, y allí, en Algeciras, nacimos sus dos hijas: Francisca y María José.

Cuando murió el cobrador de Facinas le ofrecieron su puesto que aceptó muy contento por poder volver a su pueblo; así que en 1963 volvió ya trabajando como cobrador del coche de Facinas.

Faltando algunos años para su jubilación, quitaron a los cobradores de los coches de línea y lo mandaron a él a Tarifa a trabajar en las oficinas, y otra vez tuvimos  que irnos a vivir fuera, esta vez  a Tarifa, donde se jubiló en 1989 volviendo de nuevo  a su pueblo.

El día 21 de Diciembre murió su mujer, compañera de su vida, y se tuvo que adaptar a vivir con sus dos hijas, sus yernos Francisco y Fernando y sus nietos Patricia, Fernando, Alejandro y Francisco que lo llenaron de alegría.

Con nosotros ha vivido, echando sus partiditas de dominó y ayudando en lo que podía hasta el día 22 de Octubre del 2014 en que falleció.

Siempre estará entre nosotros.

Francisca Serrano de Saro